Femme inconnue...

Noches frías de cigarros que se van consumiendo entre las añoranzas del ayer, sigo viviendo y recordando aquellos días que han pasado. Y así va transcurriendo el tiempo sin dar marcha atrás y mi existencia va rondando entre sueños vagos, entre ilusiones vivas y entre la esperanza que se va consumiendo al igual que un cigarrillo.

Recordando aquellas personas que se han marchado y que han dejado huella en un iluso corazón quien se resiste a dejar de creer en aquel sentimiento que le hace falta, y auque esté agrietado por los fuertes golpes de las decepciones vividas, inmute trascurre su tiempo esperando ver llegar aquel hermoso ser que lo salve de su cautiverio, aquel que se forja con la inmensa soledad y la tristeza; Fortaleza edificada a base de falsos amores proféticos que se decían ser los únicos y verdaderos, blasfemias de seres falsarios cuya empresa era solo pasajera.

Desde hace tiempo ha venido esperando en su cautiverio la llegada del verdadero, del único y tan anhelado salvador. Aquel que sin saber siquiera como es, lo regocija y lo hace caer en el sueño repetitivo que ha tenido en alguna de las tantas noches de blancas Lunas y de Bóvedas Estelares, va cayendo rendido y dichoso en un placido sueño donde en el cual deja de paso todo sufrimiento y dolor. Es en aquella escena de un atardecer dorado y de cálida brisa, donde el camino de ladrillos de color amarillo lo llevan asía los brazos de una frágil figura que los extiende esperando impaciente el feliz encuentro. Aferrándose al momento que tal pareciera durar una eternidad, esperando el clímax anhelado y sin final. Es ahí donde todo se resume en; Dos almas al unísono dando vueltas al compás de un bello vals.

Bello sueño de un ser que vive de ilusiones, que se alimenta de fantasías y que inevitablemente para tragarlas tiene que beber el amargo licor de sus lagrimas, se aferra con fuerza y convicción al momento lleno de actos donde no existe mas el dolor y aunque en ocasiones para retornar al camino de ladrillos que llevan a la inmensa felicidad el sendero se tornase escarpado, va caminando sin titubear entre las sombras, aferrándose a ese instante tan lejano pero tan deseado como si de ello dependiera su propia existencia. Puede ser que solo sea feliz viviendo de aquel sueño y que aunque jamás pueda volverse una verdad, aún así...

Aún así sigo viviendo de aquel sueño, asiéndome a la idea que algún día será una realidad y no tan solo una simple ilusión de una esperanza casi consumida. Hoy sin conocer tu rostro mi bello ángel, a ti que algún día te he de encontrar al final del camino de ladrillos de color amarillo, déjame decirte hoy que te sigo esperando sin importar el pasado, sigo creyendo en aquel sentimiento y que desde el inicio de mi sentir...

-Yo te amo- Aunque no tenga la remota idea de quien seas.