Cuento...

Pues bien, en la semana a mi sobrina le dejaron de tarea hacer un Cuento sobre cualquiera de los tres símbolos patrios de México, original nada sacado de la interne´ ^^¡... en fin me pidió a mí si le echaba la mano en eso y bueno les expongo lo que escribí, (seguro se darán cuenta de que ella no lo escribió) pero como esta la educación en nuestro país, e igual le vale mauser a su maestra, pues no mas piden tareas y tareas y ni las califican no mas ven que llevas la tarea y ya, o cuando estas ahí haciendo maquetas para que diga la maestra que siempre no, como encabronan esos dizque maestros.

Algunas palabras están en Náhuatl les dejo la lista de las palabras, así como el significado:

Nantli: madre, mamá
Tahtli: padre, papá
Ilamatl: anciana, abuela
Colli: anciano, abuelo
Tlamatini: sabio, erudito
cuauhtli: águila
coyotl: coyote
tochtli: conejo
coatl: serpiente
tletl: fuego
metztli: luna
centli: maíz

Para las palabras me apoye en este sitio “http://mexica.ohui.net/”

El cuento es sobre el Escudo Nacional... sin mas preámbulos los dejo con esto (¬¬ que de hecho no le puse titulo) en fin, ilustrasen un poco ya que aquí también hay cultura y orgullo de ser de este País.

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Cuando jugaba por el valle siempre a la vista de Nantli quien me cuidaba del coyotl quien aullaba en el cerro y de que en mis juegos tuviera cuidado de no ser mordido por la coatl, mientras Tahtli regresa de la dura jornada en el cerro donde se encontraba la milpa, de donde la tierra nos daba el centli con el que Nantli hacia las tortillas para comer.

En ese lugar cercas del río veía a mi Ilamatl quien con paciencia limpiaba al tochtli para comerlo, ella sabia que me gusta comerlo asado, a lo lejos veía a un grupo de gente en el cual estaba mi Colli, en esa ocasión me apresure para alcanzarlo pero mi Ilamatl me detuvo diciéndome: “Que aun era muy joven para estar con ellos”, pero la curiosidad era tan grande que la desobedecí y como el veloz tochtli corrí por el río, pero en eso Tahtli me detuvo y me miro con seriedad pero con ternura en su voz, me dijo: “Pequeño hijo mió has de entender que aun te falta mucho por aprender y recuerda que a tu Ilamatl debes obedecer”, entre sus brazos me llevo y en el camino le conté de mis aventuras, le dije que había visto descender al cuauhtli y que había escuchado al Coyotl aullar en el cerro y que Nantli siempre me cuidaba.

De noche mi Colli me contaba historias maravillosas de que algún día estaríamos en lugar donde por años viviríamos, y que jamás regresaríamos a nuestra casa en Aztlán, pues los dioses habían dicho donde deberíamos ir y que ese lugar se llamaría “México”, maravillado por tan hermosas historias siempre me preguntaba quien eran los dioses de quien mi Colli hablaba. Un día le pregunte que, ¿Quien era ese dios?, de las historias que me contaba y con seriedad y orgullo me dijo que era: “Huitzilopochtli quien naciera de Coatlicue, la madre tierra”, que él había hablado con los grandes señores y les ordeno salir de Aztlán para encontrar el lugar donde una gran ciudad y un imperio nacerían.

Muchos años han pasado de ese día, hoy mi Ilamatl y Colli ya no están y Nantli y Tahtli se han vuelto ancianos y yo me he convertido en hombre, y ahora yo soy quien cuido a Nantli y soy también quien trabaja la tierra como lo hacia Tahtli, aun recuerdo aquella historia que me contaban de pequeño y me sigo maravillando con tan hermosa imagen de aquella gran cuidad que emergiera de ese lugar marcado por los dioses.

Ahora tengo edad para estar con los grandes señores y en las noches a la luz de metztli y al calor del tletl, he escuchado hablar en el consejo al Tlamatini, quien en su sabiduría nos ha relatado aquella historia que mi Colli me contase de pequeño, pero me he asombrado aun mas pues el Tlamatini nos ha dicho cual es la señal que hemos de encontrar, y esa imagen siempre la traeré en mi mente.

Hoy nuestra alegría es mucho más grande pues Huitzilopochtli ha dicho que el día esta cerca, que sus hijos pronto dejaran de caminar y sus pies podrán descansar así como sus corazones cantaran. Huitzilopochtli nuevamente nos ha hablado, la señal esta en el centro de un lago en un islote donde el cuauhtli estará sobre un nopal y ella estará devorando a la coatl, y ha dicho que es, ese el lugar donde se ha de alzar la cuidad y que recordemos siempre esa imagen del “Águila devorando a la serpiente en el nopal”, pues esa imagen en el porvenir de nuestra raza unirá a varios pueblos en una sola nación.